De nuevo elijo una fotografía de Esmeralda para pintar un paisaje, aunque esta vez todavía se parece menos al original en el que se inspira. He cambiado la luz y he imaginado un atardecer, seguro que el sol no se pone por donde yo he pintado, pero eso lo saben los que han estado allí y espero que guarden el secreto. He puesto los colores muy diluidos para dar suavidad a las sombras, quitando elementos del fondo y dejando unos árboles con colores apagados a medida que se alejan del primer plano. El centro de interés esta en el árbol, que destaca sobre las luces del fondo, lo mismo que ocurre en la foto.
Para compensar o acompañar el cuadro -eso depende de cada uno- copio unos versos de Antonio Machado, que me sirven de disculpa:
Para compensar o acompañar el cuadro -eso depende de cada uno- copio unos versos de Antonio Machado, que me sirven de disculpa:
Yo voy soñando caminos
de la tarde. ¡Las colinas
doradas, los verdes pinos,
las polvorientas encinas! ...
¿Adònde el camino irá?
Yo voy cantando, viajeroa lo largo del sendero...
—La tarde cayendo está—.
«En el corazòn tenía
la espina de una pasiòn;
logré arrancármela un día,
ya no siento el corazòn.»
Este paisaje es precioso, me gustan mucho los colores que has usado, un poco inusuales en ti... Me lo pido...
ResponderEliminarMavi
No es por presumir (siempre se dice eso ), pero creo que los colores estan mejor en el original que en la fotografía. Tuyo será.
ResponderEliminarBesitos.
Hola Julián!!, el cuadro te ha quedado precioso,está tremendamente conseguido, has sabido usar los colores y las luces muy bien..., y de verdad pienso que esto no es nada fácil conseguir..., te felicito nuevamente y te doy la gracias por enseñarnos estos cuadros tan bonitos... Un abrazo.
ResponderEliminarPuesta esta vez hasta me ha gustado a mi y mi hija que estudió decoración y es mi crítica mas severa.
ResponderEliminarMuchas gracias por seguir mi blog. Espero ver tus próximas fotografías aunque tengo mucho material con tu Blog.
Saludos